Para el CEPR Ciavieja, una iniciativa sostenible podría centrarse en el desarrollo de un Huerto Ecológico Educativo, diseñado como un espacio de aprendizaje activo sobre sostenibilidad, alimentación saludable y respeto por el medio ambiente. Este proyecto involucraría a estudiantes, docentes y familias, quienes participarían en la preparación de la tierra, la siembra y el mantenimiento de cultivos ecológicos, como hortalizas, frutas y plantas aromáticas. Cada clase tendría una sección del huerto asignada, permitiendo que los estudiantes aprendan sobre los ciclos de crecimiento, la importancia de la biodiversidad y el compostaje. Además, se instalarían puntos de recolección de residuos orgánicos en el comedor y en las aulas para generar compost, que luego se utilizaría para fertilizar el huerto sin productos químicos.
El huerto ecológico también sería un espacio ideal para desarrollar actividades prácticas y multidisciplinares. Por ejemplo, en las clases de ciencias, los estudiantes investigarían los beneficios de los cultivos orgánicos y los efectos de los pesticidas en la biodiversidad. En matemáticas, podrían calcular la cantidad de agua necesaria para los riegos, y en educación artística, diseñarían carteles informativos sobre las plantas y el uso del compost. Se organizarían jornadas abiertas para que las familias visiten el huerto y participen en talleres de siembra y recolección, promoviendo así la implicación de toda la comunidad escolar en un proyecto que fomente el respeto por la naturaleza y el valor de una alimentación sostenible.
